Vamos tras alguien, no sé con quién, ni tras quién. Veo que es
un hombre de 45/50 años.
Es un patio. Subimos una escalera.
A media escalera siento que me mojan, y veo que me
arrojan un fósforo.
Las distancias son incoherentes veo la caja y el fósforo
encenderse muy cerca.
Pero luego veo al fósforo caer desde más altura, desde
metros sobre mi cabeza.
Mantengo cierta calma, aunque no hay dolor, tengo la certeza de estar prendiéndome fuego.
Fuego transparente. Lo intento apagar.
Alguien abre la canilla que señalo mientras intento
acercarme rápidamente pero sin sentir desesperación.
( veo también una segunda canilla en una pared perpendicular a la que me dirijo, un metro y medio más alejada)
No siento el fuego quemar, tampoco lo veo. Solo sé que necesito empapar mis brazos y mi cabeza con el agua.
( veo también una segunda canilla en una pared perpendicular a la que me dirijo, un metro y medio más alejada)
No siento el fuego quemar, tampoco lo veo. Solo sé que necesito empapar mis brazos y mi cabeza con el agua.
Mi mano llega bajo el agua, siento una extraña sensación de
ardor.
No ardor por la quemadura que creo que está teniendo lugar,
sino ardor producido por el agua. El agua está fría, pero como si al mismo
tiempo se tratara de fuego líquido.
Esto no me impide lavar mis manos y mojar mi cabeza.
Me escapo del sueño, despierto, son las 4 AM aprox.
(durante la noche entre 6 y 7 de abril)
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